Cortamos patatas en rodajas ligeramente gruesas y les hacemos unos pequeños cortes. En una bandeja de horno con unas gotas de aceite las colocamos junto a unos trozos de pollo (la parte que más nos guste) a los que también les debemos hacer cortes para que entre mejor el jugo. Cortamos una cebolla grande en medias lunas y las vamos colocando por los huecos libres o por encima de las patatas.
Cuando todo esté colocado en la bandeja, sazonamos con sal y pimienta y añadimos un poco más de aceite. Añadimos perejil picado, un baño de vino blanco, el jugo de 3 o 4 limones e insertamos parte de la pulpa de estos por los cortes del pollo [reservamos un poco de zumo].
Horneamos a 200º durante 40-45 minutos mirando que no se pegue y añadiendo un poco de zumo de vez en cuando.
¡ Buen provecho !
No hay comentarios:
Publicar un comentario